“Una pasión noble da alas al corazón…”
Dice el filósofo francés Teilhard de Chardin “lo que nos humaniza es el amor, sentirnos aceptados y queridos como nadie es la verdadera felicidad”, más adelante continua diciéndonos “Una pasión noble da alas al corazón. Por eso el mejor reactivo para reconocer hasta qué punto un amor es elevado sería observar en qué medida se desarrolla en el sentido de una mayor libertad de espíritu. Cuánto más espiritual es un amor, menos absorbe y más empuja a la acción” ciertamente estas palabras resume mi manera de experimentar esta energía, creo coincidir con aquello que siempre he pensado y que paulatinamente he comprendido con el corazón.
Dice el filósofo francés Teilhard de Chardin “lo que nos humaniza es el amor, sentirnos aceptados y queridos como nadie es la verdadera felicidad”, más adelante continua diciéndonos “Una pasión noble da alas al corazón. Por eso el mejor reactivo para reconocer hasta qué punto un amor es elevado sería observar en qué medida se desarrolla en el sentido de una mayor libertad de espíritu. Cuánto más espiritual es un amor, menos absorbe y más empuja a la acción” ciertamente estas palabras resume mi manera de experimentar esta energía, creo coincidir con aquello que siempre he pensado y que paulatinamente he comprendido con el corazón.
A lo largo de mi vida, con varias experiencias de amistad, fraternidad y amor puedo decir con propiedad que aquello que nos hace importante es el amor.
Tenemos gran fortuna cuando hemos de encontrar aquella alma que está siempre con nosotros, en el silencio, en la distancia, en la alegría, en el dolor e incluso en la rutina, siempre que nos falte por cualquier circunstancia valoramos como nunca su presencia, sus risas, sus niñerías, sus equivocaciones, sus inquietudes, sus descubrimientos, sus besos, caricias y abrazos.
La vida esta llena de seres que aman y que son naturalmente buenos, nos dice santo Tomas de Aquino, pero algunos han de permanecer fieles a nosotros, pareciera que han sido creados para estar con nosotros y ese estar es compartir la vida en todas sus circunstancias, con gran libertad de espíritu y al vivirlo con transparencia y sencillez ese sentir pasa a ser una gran energía que nos inunda de felicidad, porque nuestro deseo esencial es ser feliz.
Recordar con signos y saludos un año de amistad, me atrevería a decir un amor espiritual, una pasión noble, nos llena de vida y nos conduce a actuar con veracidad y compromiso cada día, para que lo que se ha sembrado entre alegrías y dolores permanezca vigoroso e inagotable. Nuestro desafío ha de ser que este noble sentimiento sea motivo de crecimiento para otros, que aquello que hemos experimentado en estos tres años nos ayude a entender a los demás y a ofrecerle una posibilidad de amistad, para que sientan que esto es simplemente grandioso.
Las líneas que escribo intentan ser una explicación más o menos acertada de lo que es el amor de amistad, a la vez decirte lo responsable que eres para que llegara a estas conclusiones, sin la experiencia de pasión noble, jamás habría de entender en qué consiste tan magnifica energía que pareciera mover el mundo, nuestro mundo y mi mundo.
Cada día agradezco a Dios tu compañía, tu presencia y ausencia en mi existencia, le das sentido y entusiasmo para seguir este camino al cual El me ha llamado, creo que hemos conquistado todo cuanto quisieran vivir los demás, algo me dice que esto será perpetuo, que aunque nos separen kilómetros y circunstancias nuestra unión permanecerá fiel, porque hemos construido con bases sólidas, como lo son la verdad y la caridad.
La vida se puede vivir sobre un arcoíris, lleno de alegres colores que resume tu vida, alegre y entusiasta, mi gran deseo para contigo es verte feliz y que tus sueños se hagan realidad y a pesar de que la vida muchas veces viene cuesta arriba, se puede decir “que mundo tan maravilloso” y que es posible ver a las personas decirse “TE AMO”,
